Rehabilitan zona arqueológica en Dzibilchaltún con inversión de 17 millones de pesos
Especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) realizan trabajos en la Casa Cural de la Capilla Abierta de Dzibilchaltún, Yucatán, zona arqueológica en la que se hallaron diversos vestigios precolombinos, como fragmento de un mascarón de Chaac, Dios Maya de la Lluvia.
En el edificio histórico que data del periodo colonial se realizarán trabajos de restauración, luego de seis décadas como parte del Programa de Rescate de Zonas Arqueológicas (Promeza).
Los trabajos en el inmueble colonial iniciaron aproximadamente el pasado 15 de noviembre, utilizando material lítico en los edificios precolombinos.
A dicha estructura se le dio mantenimiento y se restauró en la década de los sesentas del siglo pasado; sin embargo, con el paso del tiempo sufrió deterioro, por lo que en este año se determinó su restauración, por parte de especialistas del Centro INAH-Yucatán.
La Casa Cural era el sitio donde dormían los frailes franciscanos, la cual se ubica en el costado norte de la Capilla Abierta.
Durante los trabajos se observó que las paredes estaban hechas de las piedras labradas de los edificios prehispánicos, detectando vigas así como piedras de tipo bota, de estilo Puuc, además de un fragmento de metate.
Al limpiar el lugar apareció una piedra labrada que asemeja a un cuerpo serpentino, así como también a una estructura que bien pudo formar parte del mascarón de la deidad de la lluvia, Chaac.
Todas estas piezas fueron utilizadas como sillares, parte del relleno de la pared de mampostería, la cual, en determinada época se vino abajo y ahora buscan nuevamente levantarla.
Asimismo, apareció el segundo nicho del edificio, con las mismas características del ubicado en el otro extremo, por lo que se estudiarán las fotos más antiguas del sitio para determinar su existencia.
Al retirar la maleza del lugar, a un costado de la Casa Cural apareció en el piso un semicírculo, el cual formó parte del anexo de la Capilla Abierta, con techo de material perecedero.
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El proyecto de rescate arqueológico de Dzibilchaltún pretende una inversión de 17 millones de pesos para la restauración de la plaza y estructuras de la zona sur de esta zona arqueológica, incluso el juego de pelota de unos 50 metros, se pretende que con los trabajos de restauración incremente en 30 por ciento la afluencia turística.
